En un electrizante segundo juego de la Superfinal, Villa Mitre venció a Olimpo por 94 a 84 y se quedó con el título del Torneo de Primera División. El equipo de Menéndez supo capitalizar la ventaja obtenida en el primer encuentro y, a pesar de la resistencia aurinegra, logró imponer su juego para desatar el festejo en su cancha.
El partido fue una batalla intensa, tal como se esperaba tras el ajustado 86-82 del Juego 1. Olimpo salió decidido a igualar la serie para forzar un tercer y definitivo encuentro, pero se encontró con un Villa Mitre que, si bien mostró algunos baches defensivos, mantuvo la concentración en los momentos clave y fue letal en ataque.
A diferencia del primer duelo, donde Pennacchiotti fue la figura excluyente, en esta ocasión el goleo estuvo más repartido, aunque el interno volvió a ser fundamental para generar faltas y anotar desde la línea de libres. Villa Mitre logró mantener su intensidad física y aprovechó las variantes en el juego interno para desgastar a la defensa de Olimpo.
Por el lado de Olimpo, Ruesga y Dottori nuevamente fueron los más destacados, pero el equipo extrañó una mayor contribución de Diel y Alimenti, cuya jerarquía no alcanzó para contrarrestar el embate tricolor. La defensa interna, un punto a mejorar tras el primer partido, siguió siendo un talón de Aquiles ante la eficacia de Villa Mitre cerca del aro.
El encuentro se definió en los instantes finales, donde la experiencia y el aplomo de Villa Mitre pesaron más. Los de Menéndez calibraron mejor la mira y controlaron los desequilibrios generados por los jugadores de Olimpo, sellando una victoria que les permite volver a coronarse dentro de la categoría.
Con este triunfo, Villa Mitre cierra una serie formidable y se consagra campeón, demostrando su superioridad en una Superfinal que mantuvo a los fanáticos del básquet bahiense en vilo hasta el final.



