El vocero presidencial, Manuel Adorni, confirmó que el presidente Javier Milei firmó el decreto que da inicio al proceso de privatización de la empresa Belgrano Cargas y Logística S.A.
Este movimiento busca que el Estado deje de operar los servicios ferroviarios de carga, incluyendo toda su infraestructura como material rodante, vías, talleres e inmuebles. La decisión, según el Ejecutivo, responde a un «déficit obsceno» y una cantidad excesiva de empleados, con un balance negativo de 112 millones de dólares el año pasado.
El titular de la Agencia de Transformación de Empresas Públicas, Diego Chaher, detalló que la empresa opera tres líneas ferroviarias que abarcan 7600 kilómetros. Se implementarán siete procesos de concesión diferenciados: uno por la vía, que permitirá el cobro de peaje e incluirá el traspaso de los empleados afectados; dos concesiones de locomotoras que fomentarán la competencia e incluirán a sus conductores; dos concesiones de vagones; y dos concesiones de talleres con sus empleados asociados.
El Gobierno también cuestionó al líder sindical Omar Maturano por presuntas irregularidades en la gestión de la empresa, destacando el ingreso de personal afín a su grupo. Desde los gremios, por su parte, justificaron la presencia de múltiples conductores en los trenes de carga debido a la baja velocidad promedio y las largas horas de viaje, exigiendo que se cumpla con la declaración de emergencia ferroviaria para mejorar las condiciones de seguridad.
(Clarín)