Durante la madrugada se produjo un nuevo derrame de petróleo en el estuario de Bahía Blanca y Coronel Rosales, que otra vez involucra a la empresa Oiltanking. Ocurrió otra vez en la monoboya Punta Cigüeña frente a Punta Alta.
“Estos derrames suelen ocurrir, pero que sean de forma tan cotidiana no es normal y aun que lo fuese, genera un impacto ambiental grandísimo. Es un vacío ambiental que nadie paga. El estado no les exige que paguen, todo sigue y es un costo que pagamos todo nosotros”, expresó el abogado Lucas Beier, quien lleva adelante varias denuncias de contaminación en la ría.
Por otro lado, apuntó directamente a la ausencia de políticas que defiendan el medio ambiente y la imperiosa necesidad de que se comience a trabajar ala respecto. “El otro gran problema que tenemos es la ausencia del estado, en cuanto a controles y sanciones. El estado esta del lado de las empresas y no es de un gobierno, todos tienen la misma postura. Es defendamos a las empresas y no al medio ambiente”, mencionó.
Vale recordar que el 27 de diciembre se produjo otro episodios de estos, y la situación fue denunciada por pescadores locales que transitan con frecuencia por el sector. También se le suman denuncias por parte de diferentes organizaciones ambientalistas de que el derrame no fue informado ni se actuó a tiempo para contenerlo.
