Patricia Anzoateguy y Julio Alonso son los abogados del hombre acusado de abusar de su hijo de 3 años de edad, quienes refirieron que, por el tema de la perspectiva de género, cuando se da una denuncia por violencia de algún tipo contra una mujer o niño se debe investigar, “eso está bien, pero fueron blandos en ver las pruebas que acumulamos”.
Cuando indagaron al acusado pidieron pruebas, ya que consideran que no hay abuso, y admiten que pueden probar que los hechos nos fueron así, “vamos a poder probar los errores que fueron ocurriendo durante la instrucción”.
Refirieron que la complicación la tienen con juntar al jurado, por lo que pidieron que la gente se acerque y cumpla con este requerimiento.
“Son hechos que no ocurrieron, el menor declaró en la cámara Gesell”, dijo Anzoateguy.
Por su parte, Alonso, señaló que el acusado está preocupado ya que hace cinco años no tiene contacto con su hijo, al igual que el resto de la familia, además de la impaciencia por los tiempos de la justicia.
“Es una situación donde se estaba llevando a cabo una separación conflictiva, había varias iniciaciones judiciales y se da esta calumnia”, dijo el abogado.
Según la investigación realizada por la UFIJ N.º 4, a cargo del fiscal Diego Torres, los hechos abusivos habrían ocurrido entre 2019 y 2020 en el interior de dos domicilios contiguos propiedad del acusado, quien se encontraba separado de la madre de la víctima, y donde el pequeño de 3 años iba de visita para tomar contacto con él.
La denuncia fue radicada por la madre de la víctima quien observó comportamientos extraños en el niño y una reiterada negativa a ir con su padre, acompañada de angustia y llanto, lo que derivó en visita a profesionales psicólogos infantiles quienes detectaron los primeros indicios de abuso.
Durante la instrucción de la causa se recolectaron diversas medidas de prueba que permitieron elevar la causa a juicio.



