En el día de hoy se llevó a cabo la inauguración del cenotafio construido por la Unión de Recibidores de Granos y Anexos de la República Argentina (Urgara) en la zona de ingreso al Balcón del Mar, a pocos metros del elevador.
Será un lugar para recordar a las 22 víctimas de la tristemente recordada explosión del Elevador Nº 5, ocurrida en los primeros minutos del 13 de marzo de 1985.
El evento había sido organizado para el 13 de marzo último, al cumplirse 40 años de la tragedia, pero debió ser reprogramado por la inundación del pasado 7 de marzo.
“Son 40 años tratando de sostener la memoria de estas víctimas, trabajadores, fue el accidente laboral, sabemos que hay algunos matices con respecto a eso, pero uno de los más trágicos de la historia de la Argentina”, comenzó relatando Pablo Palacio, Secretario General de Urgara.
Además, haciendo un poco de historia reflexionó que, en el 85, en el gobierno de Raúl Alfonsín, el Ministerio de Trabajo estaba a cargo por un tiempo corto de Juan Manuel Casella y en junio del 84 a instancias de los trabajadores de la actividad, con trabajadores de la ex junta Nacional de Granos, en ese momento el Ministerio de Trabajo hizo un dictamen y envío una resolución declarando los riesgos y la insalubridad de los elevadores de la ex junta. “Que paradoja, 10 meses después pasó lo que pasó. Lo que nos queda por pensar es que no fallaron solo el Estado, fallamos todos, los trabajadores, funcionarios. Estas cosas pasan cuando se alinean todas las imprudencias, hacíamos asado ahí arriba”.
Contó además que crearon un departamento específico para trabajar con los trabajadores y darles las herramientas necesarias para preservar sus vidas y también a las empresas, ya que señaló que de estas cosas se deben sacar conclusiones y mejorar día a día además de tomar conciencia de que para desarrollar su actividad ponen en riesgo a los trabajadores y los deben cuidar.
Por su parte, Santiago Mandolesi Burgos, Presidente del Consorcio del Puerto, agradeció a todos los presentes y aseguró que estuvo en varias oportunidades en actos recordatorios y en varias oportunidades ha conversado con Palacio que había que buscar otro espacio para rendir homenaje a las víctimas, para que los vecinos, familiares o quienes quisieran recordar ese momento lo hagan sin tener que ingresar a la planta.
La construcción de memoria colectiva, consideró que es seguir recordando y trabajando para que no vuelva a ocurrir una tragedia de esta magnitud.