La fecha se instauró a partir de un hecho trágico ocurrido en 1998. Pretende recordar a las víctimas y también agradecer a todas aquellas personas que participan en brigadas forestales y arriesgan su vida.En 1998, cinco bomberos murieron mientras trabajaban para apagar un incendio forestal en Canadá. Ese hecho, sumado a otros incidentes trágicos ocurridos durante la lucha contra los incendios forestales en todo el mundo, fue el punto de partida para el inicio de un movimiento que se ha ido extendiendo por diversos países.
A pesar de que el Día del Bombero Voluntario es el 2 de junio en nuestro país, el 4 de mayo está destinado a reconocer el valor y trabajo de los bomberos forestales que arriesgan su vida en pos de extinguir grandes extensiones de fuego, cada vez más intensos y frecuentes en un contexto de cambio climático.
El uso de una cinta roja por parte de personas que integran brigadas forestales funciona como gesto simbólico que muestra respeto y hace presente el carácter de riesgo que presenta el trabajo de los combatientes forestales.
En nuestro país, la Administración de Parques Nacionales de Argentina (APN) tiene bajo su responsabilidad el cuidado y la preservación de muestras emblemáticas de la diversidad biológica del patrimonio natural y cultural del país, así como sus rasgos paisajísticos más sobresalientes. En este sentido, la prevención de incendios es clave en pos de la conservación de estas muestras que deben ser resguardadas así como incrementadas para beneficio de las generaciones presentes y las futuras.
La Dirección de Lucha contra Incendios Forestales y Emergencias (DLIFE) de la APN es la encargada de establecer lineamientos y estrategias de prevención de fuegos no deseados, manejo de quemas prescriptas y rehabilitación ecológica.