Las importaciones de carne porcina desde Brasil aumentaron exponencialmente en los últimos meses, generando serias preocupaciones dentro del sector productivo local.
Con un aumento superior al 300% en el primer trimestre de 2025 en comparación con el mismo periodo de 2024, el ingreso masivo de carne importada amenazó con impactar el mercado local, afectando la competitividad de los productores argentinos.
En el primer trimestre de 2025 se registró un incremento sin precedentes en las importaciones de carne porcina desde Brasil. Se importaron más de 13.000 toneladas de carne, lo que representó un aumento del 353% en volumen y 377% en valor en comparación con el mismo período del año anterior. Brasil, principal proveedor de carne porcina en este contexto, representó más del 95% de las importaciones.
Este crecimiento desmedido comenzó a generar un serio desequilibrio en el mercado de la carne porcina en Argentina, donde los precios internos no pudieron competir con los costos de los productos importados.
Juan Uccelli, consultor en el sector porcino aseguró que “la importación sigue molestando al sector y se da por una situación de tipo de cambio que no es el adecuado. Todos explicaron en los últimos tiempos que el dólar esta muy atrasado y eso nos descoloca frente a nuestras competencias, y Brasil tiene un precio de venta muy barato y nosotros estamos caros en dólares, razón por la cual entra mercadería. Ingresaron al país contenedores con carne porcina por más de 35 millones de dólares en los primeros tres meses del año, con casi 14.000 toneladas, lo que constituye una cifra récord”.
Según el analista, para ver algo similar hay que ir hasta la década del 90, cuando se importaban 70.000 toneladas anuales y lo cierto es que “la proyección de este año, si seguimos así, puede quedar cerca de las 60.000 toneladas, lo que sería una locura. Esta imputación está afectando al productor porque distorsiona los precios que recibe”.
(Ámbito)