La Comisión Directiva del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) resolvió mantener su estructura sin despidos, tras una reunión en la que se debatieron dos propuestas sobre el futuro del organismo. La iniciativa impulsada por la Dirección Nacional, que contempla una reestructuración sin cesantías, prevaleció sobre la alternativa del Gobierno Nacional, que proponía un fuerte recorte con cierre de experimentales y venta de tierras. La medida cuenta con el respaldo de la estructura del INTA a nivel nacional, incluyendo su sede en Hilario Ascasubi.
Si bien no habrá despidos, la Comisión Directiva aprobó la “Adecuación y Fortalecimiento de INTA”, que implica algunos cambios. Se dispuso el cierre de la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) AMBA, con su personal sujeto a un proceso de reestructuración. Además, la Dirección Nacional deberá reducir las Direcciones Nacionales Adjuntas (DNA) a siete en los próximos 15 días y redefinir el área de Agricultura Familiar como Producciones Regionales y de Pequeña Escala en un plazo de 30 días.
También se determinó la disolución de la unidad de consultoría del Consejo Directivo y la limitación de funciones de los consultores hasta marzo de 2023. Desde el sector, destacaron que la decisión evitó un ajuste mayor, atribuyéndolo a la resistencia de los trabajadores y el respaldo de los directores de las experimentales y regionales
(Info Villarino)