El mismo arrojó que el valor de la Canasta Básica Alimentaria en febrero para no ser pobre es de $1.229.856, y para no pasar la línea de indigencia fue de $523.343, lo que representa un 1,1% más con respecto al mes anterior.
Durante febrero, algunos alimentos registraron subas significativas como lo fue el caldo concentrado lideró los aumentos con un 7,3 %, seguido por el queso crema (7,1 %) y el queso de rallar (6,6 %). También se destacaron el aceite de girasol (6,0 %), el queso cuartirolo (5,4 %) y la nalga (5,3 %), reflejando el fuerte impacto en productos básicos de la canasta.
En un segundo lugar hubo aumentos sobre el azúcar, la leche fluida, la cerveza y la carne picada, con incrementos que oscilaron entre el 4,7 % y el 4,9 %.
Entre los bienes y servicios no alimentarios, los aumentos más notables se dieron en calzado para mujer (8,9 %), ropa interior y exterior para mujer (6,4 % y 5,8 %), detergentes y desinfectantes (4,6 %), y telefonía, internet y telecomunicaciones (3,9 %).