En una rueda con moderado monto operado, que alcanzó los USD 310,4 millones en el segmento de contado, de los cuales el Banco Central compró USD 36 millones, el 11,6% del volumen de negocios.
Tras cuatro sesiones sin compras -la última había sido el lunes 20, por solo USD 2 millones- la entidad monetaria sostiene un saldo comprador por USD 1.432 millones en el primer mes del año.
Por otro lado, las reservas internacionales bajaron en USD 84 millones, a los 29.884 millones de dólares. Incidió en este resultado la caída de la cotización del oro (-1,4%) y del yuan (-0,1%), así como una venta marginal de USD 4 millones del viernes 24 en el MULC. En el transcurso de enero el stock de activos brutos mantiene un incremento de 277 millones de dólares.
Desde que Javier Milei llegó al Gobierno, las compras netas ejecutadas por el Banco Central en la plaza de contado ascienden a unos 22.825 millones de dólares. Asimismo, las reservas brutas marcaron en el mismo plazo un ascenso de USD 8.676 millones o un 40,1%, desde los USD 21.208 millones del 7 de diciembre de 2023.
Con la publicación del decreto 38/2025, el Gobierno oficializó la baja temporal de retenciones para productos clave del agro argentino, que tendrá vigencia desde hoy y hasta el 30 de junio de 2025, junto con la eliminación total de retenciones para productos elaborados por economías regionales. Esta iniciativa abre la puerta a un mayor ingreso de divisas al mercado por exportaciones del agro.
“Para acceder a estas alícuotas es necesario pagar los derechos de exportación a los cinco días de presentada la DJVE (Declaración Jurada de Venta al Exterior), que es el trámite que deja fijado tanto la alícuota a aplicar como el precio sobre la que se aplica. Hasta ahora era 90% en ese momento, y el resto con el embarque”, analizó Dante Romano, profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral.
“Pero la disposición más ‘dura’ es que habrá que ingresar las divisas del negocio de exportación a los 15 días de presentada la DJVE. Esto no sería tan grave para negocios con entrega de la mercadería en el corto plazo -dentro de los 30 días, por ejemplo-. Pero si hablamos de aprovechar esto para vender maíz o soja de la nueva cosecha, que está entre cuatro y seis meses por delante, sería necesario contemplar los intereses por traer antes el dinero, y como el mismo quedaría pesificado, también contemplar el impacto de una posible variación de tipo de cambio”, estimó Dante Romano.
En plena discusión técnica en Buenos Aires entre el Gobierno y un grupo de funcionarios técnicos del FMI, el Poder Ejecutivo deberá pagar en los próximos días un nuevo vencimiento de intereses con el organismo, lo que tendrá impacto en reservas. El 1 de febrero el Gobierno deberá afrontar un pago de casi USD 660 millones en concepto de intereses. A diferencia de los pagos de capital que se realizaron en 2024, los intereses no son cubiertos por desembolsos previos del FMI, por lo que deben ser cubierto con reservas.
“El acuerdo con el FMI es probable, pero no en lo inmediato. Llevar adelante un nuevo acuerdo con el FMI implica que debe aprobarse en el Congreso, algo que demandará un buen tiempo. El Gobierno bajó las retenciones temporalmente, hasta tanto se defina el acuerdo con el FMI. La parte buena es que el Banco Central conseguiría más dólares, la mala es que tendrá que seguir profundizando la motosierra. Los productores, más tranquilos”, evaluó el analista y asesor de negocios Salvador Di Stefano.
Por otra parte, se conoció una decisión que puede afectar el stock de reservas: la Corte Suprema de los Estados Unidos rechazó la apelación solicitada por la República Argentina para evitar un fallo adverso que habilita a un grupo de acreedores a embargar activos soberanos por un monto estimado en 310 millones de dólares. Estos activos, depositados en una cuenta del Banco Central en la Reserva Federal de Nueva York, están asociados a los bonos Brady, emitidos en la década de 1990 y vencidos en marzo de 2023.
FUENTE: INFOBAE