El after “Black V”, administrado por los hermanos Vidal Ríos, fue clausurado en la madrugada de este miércoles por operar sin la habilitación municipal requerida. El establecimiento, ubicado en la intersección de Güiraldes y Vieytes, ya había sido objeto de cierres previos por la misma irregularidad desde su apertura en septiembre pasado.
El operativo, realizado cerca de las 2:50 durante los controles de Año Nuevo, derivó también en la elaboración de un acta de infracción, la cual fue remitida al Juzgado Correccional correspondiente para su tratamiento. Las actuaciones fueron llevadas a cabo por personal de la comisaría Séptima.
Desde su inauguración, el local ha enfrentado múltiples clausuras debido a la falta de permisos legales para su funcionamiento. Según fuentes oficiales, los antecedentes de los propietarios, los hermanos Vidal Ríos, incluyen un juicio el año pasado como presuntos líderes de una red de tráfico de drogas en la ciudad. No obstante, el Tribunal Oral en lo Penal Federal los absolvió junto a otros acusados al anular las actas de procedimiento por fallos en la instrucción del caso.