En una destacada muestra de cooperación interinstitucional, el Municipio de Bahía Blanca y la Universidad Nacional del Sur (UNS), a través del Departamento de Biología, Bioquímica y Farmacia, han iniciado la elaboración de repelente de insectos destinado a proteger a los empleados municipales expuestos al aire libre y a la población en general, a través del abastecimiento a las salas médicas locales. Así, se busca reforzar la prevención contra el dengue en época de mayor incidencia de esta enfermedad.
“Siempre decimos que la UNS es uno de los grandes activos que tiene Bahía Blanca, y el desafío es cómo vinculamos ese capital científico que tiene la ciudad en la resolución de problemáticas. Hoy vemos un resultado concreto de esa articulación virtuosa, que nació hace varios meses cuando firmamos todos esos convenios con la Universidad”, valoró el intendente, Federico Susbielles en una rueda de prensa en la que participaron también la vicerrectora Andrea Castellano, el Secretario de Salud municipal, Federico Bugatti; el jefe de gabinete, Luis Calderaro; y el secretario general del gremio de trabajadores municipales, Miguel Agüero.
Este esfuerzo es resultado de un convenio firmado en marzo entre ambas instituciones, con el objetivo de garantizar el derecho a la salud de la comunidad mediante el desarrollo de productos sanitarios de calidad y acceso público. La producción no está destinada a la comercialización. El primer lote será para los trabajadores municipales más expuestos, y para su producción se utilizó equipamiento donado por el Sindicato de trabajadores de la comuna. Luego, se distribuirá en las salas médicas locales.
“Somos una de las ciudades con mayor número de investigadores per cápita del país y creemos que es muy importante que esa investigación se ponga al servicio de la comunidad. Por eso estamos trabajando para fortalecer otros proyectos conjuntos”, señaló el rector, Daniel Vega.
“Este tipo de cooperación pone en valor el rol de la universidad pública, y cómo desde muchos lugares interviene en problemas específicos más allá de formar profesionales”, reconoció Susbielles. Según se informó desde el Departamento, el costo de producción es un tercio de lo que abonaría la comuna si adquiriera comercialmente un producto similar.
Génesis de la idea
“El proyecto nació en enero pasado tras una convocatoria del Secretario de Salud de la Municipalidad, el doctor Federico Bugatti, quien planteó la necesidad de contar con repelentes de producción local ante la inminente temporada crítica del dengue. La iniciativa, que en su concepción original incluía una planta de medicamentos, se enfocó exclusivamente en la fabricación de repelentes para agilizar los tiempos de respuesta ante la emergencia sanitaria”, explicó la decana del Departamento de Biología, Bioquímica y Farmacia (BByF) de la UNS, doctora María Gabriela Murray.
El primer lote consta de 1.100 envases de 100 ml de repelente con un 15% de DEET, garantizando estándares de calidad, eficacia y seguridad. Según informaron las autoridades, se producirán más tandas en función de la provisión de insumos por parte del Municipio. El DEET (N,N-dietil-meta-toluamida) es una sustancia química que se utiliza en repelentes de insectos para prevenir picaduras y mordeduras. Es un líquido incoloro o ámbar con un ligero aroma que se puede aplicar en la piel o en la ropa. Es efectivo contra mosquitos, chinches, garrapatas, ácaros, tábanos y pulgas.
Fue elaborado por la División de Tecnología y Análisis Farmacéutico de Medicamentos, Productos Médicos y Cosméticos, . “Este esfuerzo fue posible gracias al aporte de insumos del Municipio y al gran trabajo desarrollado por el equipo humano de profesionales Farmacéuticos del BByF”, destacaron la coordinadora de la División, doctora Cecilia Arnaboldi y la decana. Las tareas se desarrollaron en el laboratorio del Departamento, ubicado en 12 de Octubre 991 de esta ciudad. Trabajaron en su elaboración doce docentes del Departamento. “A medida que vaya llegando la materia prima seguiremos produciendo. Este proceso para nosotros es parte de lo que entendemos como extensión universitaria, y tomamos el desafío con gusto porque sabíamos que podíamos hacerlo garantizando los estándares de calidad requeridos”, agregó Arnaboldi.
El intendente de Bahía Blanca, Federico Susbieles, el rector de la UNS, Daniel Vega, y la decana destacaron el compromiso y la capacidad profesional del equipo, integrado por Arnaboldi, Constanza Lemus, Noelia González Vidal, Marcia Arroyo, Nazareth Ceschan, Luciano Benedini, Carla Crescitelli, Loreana Gallo, Noel Gravina, Virginia Gutiérrez, Nicolás López y Romina Pereira.
Susbielles y Bugatti agradecieron la colaboración institucional y señalaron que “este proyecto no sólo representa una respuesta inmediata al desafío del dengue, sino también un modelo de cómo el sector público y el académico pueden trabajar en conjunto para brindar soluciones concretas a la comunidad”.
Proyección
“El proyecto busca consolidar la autosuficiencia en la producción de repelentes y, eventualmente, expandir su capacidad para abordar otros productos sanitarios. Este avance reafirma el compromiso la UNS en la construcción de una salud pública accesible y de calidad”, valoró el rector. Además de la producción para Bahía Blanca, se firmó un convenio similar para elaborar este producto para el municipio de Coronel Rosales.