Este miércoles, la Cámara de Diputados debatió en una tensa sesión el veto presidencial de Javier Milei a la Ley de Movilidad Jubilatoria. El veto quedó firme con 153 positivos, 87 negativos y 8 abstenciones.
La oposición buscaba rechazar el veto y reinstaurar la norma, pero para lograrlo necesita dos tercios de los votos.
La sesión comenzó a las 11.00 y rápidamente se tornó polémica con la intervención a los gritos del diputado del Frente de Izquierda, Nicolás del Caño, quien acusó a algunos legisladores de actuar en connivencia con el Gobierno, denunciando la renuncia del diputado entrerriano Pedro Galimberti como parte de un acuerdo político. Además, apuntó contra las “barras libertarias” presentes en el recinto.
Fuerte operativo de seguridad en el Congreso
Ante la posibilidad de incidentes, el Gobierno de Javier Milei desplegó un fuerte operativo de seguridad en los alrededores del Congreso. El Ministerio de Seguridad, bajo el mando de Patricia Bullrich, coordinó un despliegue que incluyó efectivos de la Policía Federal, Prefectura, Gendarmería y la Policía de Seguridad Aeroportuaria, para controlar la movilización convocada por organizaciones de jubilados, sindicatos, partidos de izquierda y agrupaciones piqueteras.
Desde las 10 de la mañana, los manifestantes comenzaron a concentrarse en las inmediaciones del Congreso para expresar su rechazo al veto. Esta marcha se da en un contexto de creciente tensión tras los incidentes ocurridos en movilizaciones anteriores.