Durante las primeras horas del viernes se convirtió en Ley la norma que estipula la forma de paliar la crisis financiera y salarial que enfrentan las universidades nacionales. Con 57 votos a favor, 10 en contra y una 1 abstención, ahora la norma quedará vigente si la reglamenta el Poder Ejecutivo, aunque el Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, adelantó en un programa televisivo adelantó que será vetada “para no comprometer el equilibrio fiscal”. La suba incluye un incremento para los docentes y no docentes y generará un impacto fiscal de 735.598 millones de pesos, lo que implica el 0,14 por ciento del PBI, según informó la Oficina de Presupuesto del Congreso.
“Espero que este proyecto cuente con el respaldo del Poder Ejecutivo Nacional y que el presidente no lo vete, porque no sólo contó con una amplia mayoría en ambas cámaras, sino que además cuenta con el respaldo de toda la sociedad, como se vio en la última marcha universitaria, que fue una marcha masiva que puso en valor el rol de la educación superior para el desarrollo de nuestro país”, expresó el doctor Daniel Vega al respecto.
“Estamos muy agradecidos con los senadores que acompañaron este proyecto, que lo único que busca es darle sustentabilidad al sistema universitario nacional, uno de los principales instrumentos del país no sólo para desarrollarse, sino para generar movilidad social ascendente”, remarcó Vega.
“Quiero agradecer muy especialmente a los tres senadores de la provincia de Buenos Aires que honraron su palabra y acompañaron el proyecto”, agregó. Junto a otros 20 rectores de universidades con asiento en esta provincia se habían reunido con los tres legisladores la semana pasada en la UNLZ.