Ayer se llevó a cabo en el playón de la Universidad Nacional del Sur, una nueva campaña de recolección de residuos peligrosos.
Muchos de esos elementos son monitores, gabinetes, teclados y demás componentes electrónicos que están en desuso.
Esta iniciativa tiene como objetivo dar un destino seguro a estos residuos evitando la contaminación del aire, el suelo y el agua que puede producirse por su mala disposición.
También se descartaron medicamentos, que serán descartados con el debido proceso por farmacéuticos especializados.