Una vecina de Villa Mitre, con su vivienda en Falucho al 200, se mostró indignada y enojada por las fallas técnicas de la obra de semipeatonalización en Villa Mitre.
Según menciona Rosa, su hijo tuvo que comprar burletes para que el agua no le ingresara a su casa. “Antes no pasaba”, dijo y agregó que ella “tuvo 10 meses el auto en una cochera. Ahora vienen a romper de nuevo, ¿y donde dejamos el auto?”.
También menciona que los autos no respetan las señalizaciones y estacionan en cualquier lado para bajarse a comprar.
“Es plata tirada al divino botón y así esta la Argentina. Son ineptos los que vinieron a trabajar”, cerró.