Según el economista en jefe del Centro Regional de Estudios Económicos de Bahía Blanca Argentina, Gonzalo Semilla, ese índice del año que recién terminó “no tiene precedentes desde el año 1996 en el que comenzó la tarea nuestra”
Al explicar los guarismos finales, Semilla sostuvo que “si bien todo el año se registraron precios en alza, diciembre lo terminamos en la ciudad con el 26,1 por ciento. Ese mes fue explosivo”, admitió. Agregó que “cuando analizamos cada uno de los capítulos, el de Alimentos y Bebidas con el 31 por ciento, es uno de los más importantes porque tracciona e impacta fuertemente en las canastas básicas de consumo”.
Otros rubros con alzas notorias fueron el de Transporte con el 26%, Salud con el 213% anual, y aquí básicamente es el valor de los medicamentos. El adulto mayor que no tiene obra social o la cobertura de PAMI tiene que afrontar grandes aumentos en esos productos”, aseveró.
Semilla admitió también a BVC Noticias, que “la proyecccion de la inflación es que enero va a ser similar a diciembre, y a partir de allí se puede dar un descenso pero de manera muy paulatina. En febrero podría ser entre el 20 y el 25%, marzo con un 15 o 20% y así en disminución”. Sin embargo aclaró que “el tema es que los aumentos en muchos rubros continúan y de manera importante. Se prevé que en febrero algunos servicios públicos puedan aumentar, de manera segmentada, hasta el 300 por ciento”
Por último señaló que “muchos comparan este momento con la salida del Plan de Convertilidad o la crisis de los años 2001 o 2002, pero en cuanto a la medición del índice de inflación, nunca tuvimos una cifra como la que arrojó el año que recientemente ha terminado”, concluyó.