Dentro de la Ley Omnibus se encuentra la eliminación de la CONABIP, un ente que financiaba las bibliotecas populares.
“Es un ente que promovía las bibliotecas populares con fondos que venían del juego. Cuando teníamos que reparar un techo, lo hacíamos con esos fondos, al desfinanciarla no habría mas fondos. Lo mismo ocurre con la Feria de Libro”, expresó Oreste Retta, encargado de la biblioteca de Villa Mitre.
Según menciona, reciben un subsidio municipal de alrededor de 50 mil pesos y otro de provincia que se destina al pago de salario de las bibliotecarias.
“Son lugares de encuentro. En bahía hay 20 bibliotecas, muchas en los barrios. Algunos chicos hacen los deberes, dan apoyo escolar, les enseñan a leer, hacen talleres. En bahía están muy desarrolladas, se mantiene con la cuota de los socios pero es mínima”, comenta.
Para Retta, “el ajuste no es el correcto”, ya que ellos no representan un gran número que varíe la aguja de la economía. “No es representativo”, aclara.