A horas de la asunción de un gobierno que muy presumiblemente liberará los precios de los combustibles, la petrolera holandesa Shell dio el primer guadañazo y marcó la pauta con aumentos de 15 por ciento.
Los nuevos valores se empezaron a verificar desde hoy en las carteleras del Conurbano y la Ciudad de Buenos Aires. Los nuevos valores llevan a 400 pesos el litro de nafta súper y a cerca de 500 la premium.
Según trascendidos del sector energético, la idea de las petroleras es “corregir” los precios hasta un 30 por ciento.