Del 13 al 19 de noviembre en la sede del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en Nairobi, Kenia, se llevó a cabo la tercera reunión de negociaciones para la construcción de un tratado global para la eliminación de la contaminación plástica, de acuerdo al mandato de la Asamblea General de Naciones Unidas. A ella asistieron las delegaciones de negociadores de más de 160 países incluido Argentina junto con observadores científicos y de organizaciones no gubernamentales de todo el mundo.
El doctor Andrés Arias, profesor del Departamento de Química de la UNS e Investigador Independiente del CONICET en el Instituto Argentino de Oceanografía fue uno de estos observadores, ya que integra una coalición internacional de científicos independientes que tiene como objetivo asesorar a los países firmantes en todos los aspectos técnicos posibles a fin de lograr un tratado de plásticos global efectivo. Durante el desarrollo de las sesiones de negociación, y junto a otros 38 científicos, aconsejaron a todas las delegaciones que lo solicitaron.
“En marzo de 2022, en la reanudación de la quinta sesión de la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, se adoptó una resolución histórica para elaborar un instrumento internacional jurídicamente vinculante sobre la contaminación por plásticos, también en el medio marino”, explicó el doctor Arias.
En efecto, la resolución pidió al Director Ejecutivo del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) que convocara un Comité Intergubernamental de Negociación (INC) para elaborar “el instrumento”, que deberá basarse en un enfoque global que aborde todo el ciclo de vida del plástico, incluida su producción, diseño y eliminación. El INC inició sus trabajos durante el segundo semestre de 2022, con la ambición de concluir las negociaciones a finales de 2024.
“El problema de los plásticos ha alcanzado proporciones épicas desde la década de 1950. La humanidad fabrica actualmente más de 450 millones de toneladas de plástico al año, y cerca del 22% de los residuos plásticos se gestionan mal: se vierten o queman en espacios abiertos en lugar de depositarse en vertederos sellados, incinerarse o reciclarse. Según una estimación, el mundo va camino de acumular unos 12.000 millones de toneladas de residuos plásticos en vertederos y en el medio natural de aquí a 2050”, explica el investigador.