Curas villeros y de barrios populares del país celebraron hoy una misa “en desagravio por los ultrajes” al Papa Francisco y cuestionaron con dureza al candidato presidencial de La Libertad Avanza, Javier Milei, al que le endilgaron constantes ataques al líder eclesiástico.
“Uno se termina preguntando si alguien con ese desorden emocional puede soportar las tensiones propias del cargo público al que aspira”, plantearon los sacerdotes en la misa.
La ceremonia tuvo lugar en la parroquia Virgen de los Milagros de Caacupé, ubicada en el Barrio 21-24, en la zona porteña de Barracas, y contó con la asistencia de más de 10 mil feligreses que se congregaron en defensa del Papa Francisco.
Los sacerdotes destacaron la importancia de la presencia del Estado que, “con inteligencia acompaña el crecimiento y desarrollo” de la comunidad organizada de los barrios y advirtieron: “Parece que la amnesia se apoderó de muchos dirigentes que no recuerdan los niveles de desamparo de la gente en la crisis de 2001”.
Recordaron así los años de “ausencia del Estado” en la historia del pueblo argentino, sobre todo en los barrios pobres, que fueron los que sufrieron “sus más tremendas consecuencias”.
Afirmaron que a futuro se encuentra “la urgente necesidad de crecer en la integración socio urbana de las villas con justicia social que se traduzca en salud, educación, alimentación, acceso al deporte, trabajo y seguridad integral para los barrios que son los primeros en sufrir la inseguridad”.
Coincidieron en que “hoy más que nunca”, la convicción es “donde hay una necesidad, hay un derecho”.
Los curas salieron al cruce del candidato presidencial de La Libertad Avanza por unas declaraciones televisivas que realizó en el 2020 y que volvieron al ojo público tras el sorpresivo resultado de las PASO.
En declaraciones al programa que tenía Viviana Canosa en Canal 9, Milei acusó a Bergoglio de fomentar el “comunismo” en el mundo, y hasta lo acusó de ser el “representante del Maligno en la Tierra”.
Ofuscado, el economista disparó contra Francisco por defender la idea de “justicia social”, a la que vinculó con “la envidia” la cual es “uno de los pecados capitales”. Incluso, trató al Sumo Pontífice de “imbécil”, ante la mirada de la conductora.