El 2 de abril el empresario Carlos Carlaván mientras circulaba en una camioneta Dodge RAM escapó de un control de tránsito en Avenida Alfonsín y fue acusado de desobediencia ya que no estaba autorizado por una orden del juez de Garantías Guillermo Mércuri.
Sobre este episodio, la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal rechazó recurso de queja presentado por el abogado del empresario. Matías Bertoncello, indicando no lo dejaron apelar la resolución de la justicia de elevación a juicio.
Los camaristas Gustavo Barbieri y Pablo Soumoulou, de la Sala I, consideraron “improcedente” la queja, que solo se puede adoptar cuando “se alegue y demuestre existencia de gravamen irreparable”.
Ahora resta definir si habrá suspensión de juicio a prueba (probation), juicio abreviado o juicio oral tradicional.