El equipo albiceleste terminó en el quinto puesto de la Copa del Mundo juvenil con una victoria ante una de las máximas potencias. España venció a Francia y se consagró campeón.
El bahiense Mauro Polla como técnico señaló que “estoy contento con la preparación, el proceso y el torneo. Las malas y las buenas fueran intensas. Veníamos de un gira con rivales del mismo nivel y habían sido buenas. Hay que afianzarse y aferrarse a los planificado, hay que seguir confiando”
“Lo mejor es que entendimos el ritmo de juego que queríamos tener”, en varios partidos” dijo el técnico sobre lo más destacado de los encuentros que superaron.