El Concejo Deliberante otorgó el Reconocimiento “Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Bahía Blanca” a Ana María Borel de Selvarolo, en mérito a su valiosa actividad docente, por sus cualidades personales, valores morales, y compromiso profesional al servicio de toda la comunidad bahiense.
”Es siempre muy gratificante para nosotros recibir a los vecinos de la ciudad. Nuestras puertas siempre están abiertas para los vecinos, para las diferentes inquietudes, y también para momentos como estos que también nos honran y nos resultan sumamente gratos, que es reconocer, distinguir a un vecino de la ciudad que es merecedor de algún reconocimiento precisamente por el legado que ese vecino ha sabido dejar a toda la comunidad. Sobran motivos para el reconocimiento que hoy le vamos a hacer a Chana”, expresó la presidente del Cuerpo deliberativo, Fabiola Buosi.
Al hacer uso de la palabra, Ana María señaló, “no todas fueron rosas, también hubo espinas, pero las fuimos sorteando”.
“Es emocionante la comunidad educativa, gente muy dedicada a sus hijos. Yo no soy ejemplo de nadie, pero les quiero comentar que nací en un hogar maravilloso y solidario del abuelo Tata y la abuela Lala, con los valores que se destacaban y me acuerdo que cuando me recibí de maestra normal nacional, en el año 59’, mi papá me dijo, ‘hija, de ahora en más, sos tu propia empresaria, todo lo que logres o no logres, depende de vos’, y eso se lo fui diciendo a mis hijos y a mis nietos”, mencionó Chana.
Ana María Borel de Selvarolo hace casi 50 años trabaja con el mismo entusiasmo y amor que al comienzo, dedicándose no sólo a educar sino a formar a los niños y niñas como personas, trabajando lo emocional y el crecimiento, enseñándoles a ser buenos compañeros, y a que no existan las diferencias.
Nació en Bahía Blanca el 24 de noviembre de 1941, donde vivió hasta los 8 años cuando se mudó a la Capital Federal, cursando hasta entonces, sus estudios primarios en la Escuela Nº 2 de calle Avenida Colón.
Radicada en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, finalizó su formación primaria y secundaria y, en 1959 ingresó a la carrera Ciencias de la Educación en la Universidad de Buenos Aires, la cual no llegó a finalizar.
Preparándose para el regreso a su ciudad natal, “Chana”, como la conocen todos, realizó una serie de cursos en el Instituto Bernasconi, donde se recibió de Visitadora Escolar.
En el año 1975, junto a su socia, lograron abrir un jardín de infantes en calle Moreno al 700 llamado ‘El Principito’, uno de los pocos establecimientos de este tipo por aquel entonces en Bahía Blanca.
Dos años más tarde, en 1977, logró independizarse y abrir el Jardín “Colorín Colorado”, el que hasta el día de la fecha, se encuentra emplazado en calle Saavedra 250, una propiedad que adquirieron como inversión alternativa a un viaje frustrado.
El 1º de diciembre de 2022, esta institución educativa cumplió 47 años abierta como jardín de infantes, donde siempre trabajó un grupo humano muy dedicado, y que se esfuerza por el respeto que implica tanto compromiso, brindando un trato casi personalizado con cada familia.
El 23 de febrero de este año, “Chana” logró cumplir otro sueño más: crear e inaugurar una Escuela Secundaria a la que llamó “Del Libertador”, inaugurando formalmente actividades el miércoles 1 de marzo.