A más de 6 años de derrumbe de una obra que terminó con la vida de Eduardo Gabriel Burgos Melo, su familia se acercó a tribunales por el comienzo del juicio.
Celeste Días, pareja de ese momento, estuvo presente expresó que sintió “mucho dolor, por mucho tiempo evité esa calle, no podía ni siquiera pasar por la esquina porque me daba escalofríos pasar por donde murió quién fue el amor de mi vida. Fue muy doloroso”.
En ese entonces, tenían una hija muy pequeña que ahora tiene 6 años. “Fue difícil tenerle que explicar que su papá falleció trabajando y tener que acampañarla, llevarla a eventos, shows, escuela y explicarle que su papá no volvía. A los 6 años cayó en la realidad de lo que era la muerte y estuvo en depresión con psicologa y acompañamiento de toda la familia. Que crezca con esa falta era algo que se podía evitar”.
Era algo que se podía evitar