Micaela García, madre de la niña, dijo a BVC Noticias que su hija nació con epilepsia refractaria, “un problema que tuvo de nacimiento y que es genético. Estuvo dos meses en neonatología porque no le encontraban un tipo de medicamentos que detuvieran las convulsiones, por lo que fue bastante complicada la situación en un principio”,
La mujer agregó que “Ámbar está tomando siete medicamentos, entre ellos relajantes musculares. Cuando era bebé tuvo 90 convulsiones en un día y medio, lo que le generó desgastes en sus neuronas. No tiene control cefálico y otras consecuencias de esos primeros días”, agregó.
Micaela indicó que “lo que se está pidiendo ahora, sin respuestas hasta el momento, es un equipamiento específico, como una silla para el traslado, un chaleco para tener su columna derecha y un cuellito ortopédico”. Enfatizó en tal sentido que “tenemos un amparo judicial a favor de la nena y sin embargo la obra social se niega a responder favorablemente. Se le aplicaron varias multas y todavía continúan sin comunicarse conmigo”, agregó.
Por último dijo que “durante este mes se presentará un nuevo recurso de amparo, en este caso para mantener el servicio de las acompañantes terapeúticas, porque pagan un valor muy bajo y se tiene el riesgo que dejen de cumplir con esa vital tarea”.