El Frente de Izquierda muestra sus fichas para las elecciones 2023. En un escenario electoral trazado por el binarismo de Juntos por el Cambio y el Frente de Todos, sumada a la irrupción de La Libertad Avanza y la posibilidad de una fórmula justicialista alternativa, el objetivo de repetir el cuarto lugar de los dos últimos comicios presidenciales constituye un desafío. Tras el anuncio de la candidatura de Myriam Bregman, Gabriel Solano comunicó su intención de encabezar la fórmula del Partido Obrero (PO). El calendario electoral tiene definida como fecha de cierre de listas al 24 de junio.
Entrevistado por Ámbito, el actual legislador porteño adelantó una serie de anuncios que se realizarán en el plenario del PO, el próximo 11 de febrero en el microestadio de Lanús. “Nuestra propuesta es la fórmula presidencial encabezada por mí junto con Romina del Plá“, anunció y precisó que “en la provincia de Buenos Aires vamos a proponer a Néstor Pitrola como candidato a gobernador y en la Ciudad de Buenos Aires a Vanina Biasi como jefa de Gobierno”. Sin embargo, aclaró que el lanzamiento está sometido al voto de “2.500 delegados que estarán en el plenario junto a organizaciones que comparten nuestras posiciones”.
Myriam Bregman anunció que es una de las precandidatas a presidenta del Frente de Izquierda
El Frente de Izquierda-Unidad (FIT-U) está compuesto por cuatro partidos: Izquierda Socialista, Partido Obrero, el Movimiento Socialista de los Trabajadores y el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS). Este último espacio propuso en 2022 a Myriam Bregman y Alejandro Vilca, ambos diputados nacionales, como posible fórmula presidencial. “Fue el lanzamiento más prematuro de la política argentina, un año y medio antes”, manifestó Solano, “a nosotros nos pareció un despropósito que en medio de una crisis social tan importante la izquierda adelante a sus candidatos“.
“Son esas cosas incorrectas que se deben a motivos políticos. Los motivos políticos tienen que ver con esta idea de un Frente de Izquierda que se mueve exclusivamente con parámetros electorales y que desconoce las tareas más generales de organizar el pueblo, los sindicatos, los movimientos de desocupados y los colegios. Eso está muy mal para los intereses generales que defendemos”, añadió Solano e indicó que “por eso decidimos presentar a nuestro propio candidato. Después veremos si más adelante llegamos a un acuerdo político o no. Vamos a bregar para que eso ocurra”.
Críticas al PTS
Uno de los objetivos del plenario convocado para el 11 de febrero, según un documento difundido por el Partido Obrero, es “convocar un Congreso del Frente de Izquierda-Unidad abierto a todos los sectores” donde debatirán “qué Frente de Izquierda necesitamos”. En ese sentido, Gabriel Solano afirmó que desde el Partido Obrero “somos bastante críticos sobre cómo está funcionando nuestro Frente de Izquierda y las distintas posiciones que la integran”.
Gabriel Solano y Vanina Biasi, posibles candidatos del PO.
Foto: Prensa Partido Obrero.
Además, consideró que “el PO está metido en los sindicatos y en los barrios, y el PTS no: es una expresión básicamente electoral” y que en “el PTS vemos una actitud del tipo condescendiente con el kirchnerismo”. Observando a las próximas elecciones, analizó que “no nos parece que las PASO sean el mejor lugar para dirimir las divergencias que podemos llegar a tener pero tampoco renunciamos a ellas, en caso de que no haya un acuerdo. Es una posibilidad”.
Finalmente, se refirió a los otros espacios referenciados con la izquierda que no integran el FIT-U: “Fuera del Frente de Izquierda, casi no hay nada en la izquierda argentina. Hay algunas fuerzas pero son marginales. Vos te das cuenta porque no pasaron ni las PASO y no llegaron al 1% de los votos. Nosotros no nos cerramos a que mañana puedan participar con nosotros, pero eso no va a fortalecer necesariamente al Frente de Izquierda”.
El desafío de la izquierda en un escenario polarizado
Gabriel Solano también se refirió a las posibilidades que tiene la plataforma electoral del FIT-U en la coyuntura actual. “Yo entiendo que la bronca que existe es correcta y hay que promoverla. Es una bronca con la inflación, con la pérdida de acceso laboral, con los bajos salarios y con la caída del valor de la moneda nacional. Nosotros tenemos que encauzar esa bronca con una salida de izquierda”, sostuvo.
El dirigente del PO se mostró optimista para el 2023, señalando que “la izquierda parece un fenómeno disruptivo y ascendente en esta elección”, pero que es necesario “generar una alternativa atractiva de izquierda, porque no alcanza con criticarlos a los demás partidos. Si no sos un polo de atracción, esa crítica posiblemente no prospere”.
De cara a una construcción política a largo plazo, fue crítico de dos espacios: el Frente de Todos y La Libertad Avanza. En referencia al oficialismo, interpretó que “el peronismo está hecho pelota. Siempre se quiso identificar con los trabajadores y el movimiento popular, y hoy es el que aplica el plan de ajuste del FMI con Massa”. Por eso, aseguró que es necesario “desde el punto de vista histórico, superar al peronismo y conquistar para el socialismo a los trabajadores de Argentina”.
En cuanto al espacio encabezado por Javier Milei, el legislador porteño entendió que es “un desafío que aparezca como cuestionadora del sistema una variante reaccionaria y no la izquierda, que por definición es la que tiene que cuestionar al sistema capitalista”. “Tenemos un trabajo por delante que es el de clarificación política. Hay que demostrar a una parte de la población que la propuesta de Milei es ultra reaccionaria. Que si Milei el día de mañana llegase a ser presidente, cosa que no creo que ocurra igual, eliminaría todo tipo de derecho en materia laboral, educativa, sanitaria y de vivienda”, concluyó.
Fuente: Ámbito