Se supo que la cadena industrial textil y el Gobierno avanzan en un acuerdo, similar al que se lanzaría para 1.500 productos, en especial alimentos, hasta marzo próximo.
El dato lo confirmó el presidente de la Fundación Proteger, Luciano Galfione. “Vamos a ir a un congelamiento de dos meses (hasta el 31 de diciembre) y luego serán tres o cuatro meses cuya actualización estará ligada a la evolución del dólar oficial”, indicó.
Los empresarios que componen la mesa directiva de Protejer dejaron trascender que el congelamiento se puede extender por mucho tiempo, ya que aseguraron que los márgenes de rentabilidad en el sector son de un dígito.
Justamente Galfione, acompañado por el secretario Jorge Sorabilla, el tesorero Pedro Bergaglio y el vicepresidente Marco Meloni, en el encuentro del sector, remarcó: “El desarrollo necesita ser una política de Estado”. Destacó el crecimiento récord de la inversión, la presencia federal y la creación de empleo en el sector y alertó por la presión primarizada del mundo. Por último, pidió por las importaciones para la producción nacional ante los primeros signos de ralentización de la actividad fabril.
Para este próximo año van a invertir 235 millones de dólares para realizar inversiones industriales en herramientas, bienes capitales, máquinas. Es un monto récord contra los 194 millones invertidos en 2021. Recuperaron 6.500 puestos de trabajo frente a los 25 mil perdidos durante la pandemia.
Galfione aclaró que “no se trata solo de inversiones”, sino que, aseguró, “también está traducido en generación de empleo”. “En julio de 2022 comparado con el mismo mes del año pasado, se generaron, a julio de 2022, 7.573 puestos de trabajo registrados nuevos en relación con el mismo mes de 2020, siendo la actividad industrial con mayor creación de empleo dentro los 24 rubros analizados”, destacó.
Luego de perder 25 mil puestos de trabajo durante la recesión que se inició en 2017 y expulsó del mercado a mano de obra calificada, el sector destacó también inversiones en la capacitación de empleados en las fábricas o en articulación con estados provinciales y municipales.
El tema central es la suba de precios, la realidad pasa por el armado del valor de una remera, que es de un 50% de impuestos y, ante la posibilidad de “congelar precios” como en el rubro de alimentos y bebidas, la cadena textil prevé cerrar un acuerdo con el Gobierno para sumarse con marcas de indumentaria y de esta forma frenar la escalada de precios.
(Perfil)